En diciembre de 2015, cuando Donald Trump era candidato presidencial, un informe médico de Harold Bornstein afirmaba que la salud del ahora mandatario era excelente. Sin embargo, reveló que el informe médico lo escribió el propio Trump.


En un entrevista para la cadena de televisión estadounidense CNN, el médico Bornstein explicó que dicho informe indicaba que el entonces candidato tenía una “fuerza física y resistencia extraordinaria” y que de llegar al poder, Trump sería el “sujeto más saludable que se haya elegido para la presidencia".

“Él dictó el certificado completo. Yo no escribí ese certificado”, declaró el médico a CNN.

El informe no daba más detalles de la salud de Trump, más que apuntar que contaba con un presión arterial “excelente” de 110/65 y que el año previo (2014) había perdido siete kilos, por lo que tenía una salud cardiovascular “excelente”.


"(Trump) dictó el certificado y yo le agregué lo que no pudo poner allí", dijo Bornstein, y añadió que el informe fue dictado mientras conducía por Central Park en Nueva York.

En septiembre 2016, el médico había dicho que el certificado lo había escrito apresurado, después de que en ese tiempo empezaron a dudar sobre la salud de Trump.