David Rogelio Colmenares Páramo fue elegido este jueves por la Cámara de Diputados como el nuevo titular de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), cargo que ocupará de 2018 a 2026.

Con 377 votos, con los que alcanzó las dos terceras partes necesarias para ser designado como nuevo Auditor Superior, Colmenares estará en el puesto hasta el 14 de marzo de 2026.

Colmenares Páramo es un economista egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde también ha sido profesor de Finanzas Estatales, de acuerdo con su página oficial.

Durante la administración de Enrique Peña Nieto ha ocupado diferentes cargos públicos en el área de finanzas y fiscalización.

En 2012 fue nombrado Auditor Especial del Gasto Federalizado en la ASF y al año siguiente fungió como Contralor Interno del Tribunal Superior de Justicia Fiscal y Administrativa, que forma parte del Poder Judicial de la Federación.

Su cargo más reciente, que ostentó desde 2016 "a la fecha" fue como titular de la Unidad de Coordinación Regional y Relaciones Institucionales, del programa de las Zonas Económicas Especiales, impulsado por el Poder Ejecutivo en este sexenio.

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El cargo público que lo puso en el radar de la política mexicana lo ocupó en el gobierno de Oaxaca como Secretario de Finanzas entre 1986 y 1992. De ahí pasó a Liconsa como Director de Administración y Finanzas, cargo donde estuvo de 1995 a 1998.

Entre 1998 y 2000 fue Delegado de Banobras, dentro de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, donde posteriormente fue el titular de la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas hasta 2006, durante la presidencia de Vicente Fox.

LO QUE DIJO EL NUEVO AUDITOR
Tras tomar posesión de su nuevo cargo, Colmenares dijo que está preparado y dispuesto para fortalecer y consolidar a la ASF.

En entrevista para Radio Fórmula, sostuvo que no perderá el tiempo y trabajará intensamente porque se preparó varios años para participar en el proceso de selección.

Aseguró que su trabajo se apegará estrictamente a la ley y a las normas lo cual, reconoció, puede molestar a alguien, pues no se puede auditar por consigna ni exonerar de manera arbitraria.

El titular de la ASF sostuvo que será un auditor incómodo, lo cual “tampoco significa que todo lo veamos negro”.

Reconoció que muchas de las denuncias de la ASF no prosperan porque están mal fundamentadas, por lo que se comprometió a mejorar la eficacia de las querellas que presente el organismo a su cargo.



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