A pesar de que el presidente del comité del carnaval había dicho que no se politizaría la fiesta, fue inevitable dejar de hacerlo, pues la misma cuenta con el patrocinio del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quien no sólo aportó 10 millones de pesos, sino le pagó el vestuario a la reina del carnaval Carolina Ocampo.

Y como el que paga manda, la vistieron a la reina como ellos quisieron. El traje de jarocha de Carolina lo utilizó para su coronación, pero hubo algunas modificaciones en el mismo, pues el rebozo del traje es rojo y ella utilizó un rebozo azul. En el cabello tenía dos flores: una azul y otra amarillo claro, estos son los colores de la alianza PAN- PRD. ¿Qué credibilidad puede tener Luis Antonio Pérez Fraga si dice que no se politizará la fiesta y es lo primero que hace? Lo bueno, dicen sus malquerientes, es que éste fue el último año que organiza la fiesta pues ya está preparando sus maletas. Lo malo es que al que pondrán en su lugar es un recomendado del alcalde Fernando Yunes Márquez.